La digitalización y la transformación digital -el procesamiento y la representación digital de la información y los cambios desencadenados por ella, como la automatización del trabajo y el desarrollo de la inteligencia artificial- son omnipresentes hoy en día, e implican tanto incertidumbre como oportunidades y posibilidades.
Sin embargo, el cambio y la transformación de la sociedad es bastante natural. Es realmente impresionante lo que hemos logrado en los últimos 250 años, desde la Primera Revolución Industrial y la invención de la máquina de vapor hasta la Industria 4.0 y los vehículos en red.
La digitalización es un factor importante para ser competitivos hoy en día. Esto se aplica tanto a los empleados individuales como a las empresas e incluso a países enteros. Mientras que las empresas deben ser innovadoras, rápidas en su implementación y valientes para mantenerse al día, los empleados deben adquirir las habilidades que se necesitan en el Entorno de Trabajo 4.0.
Para las empresas, el éxito en la implementación de la digitalización significa un mejor rendimiento, ahorro de costes, la aparición de nuevos modelos de negocio y clientes más satisfechos. Sin embargo, deben prestar más atención a las normas de protección de datos, diseñar una estrategia de digitalización adecuada, invertir en nuevas herramientas de información y comunicación, y proporcionar una formación adecuada y condiciones de trabajo flexibles a sus empleados.
Los empleados se benefician de ser más flexibles en cuanto a tiempo y lugar en el que trabajar, de poder compaginar mejor la vida laboral y familiar y de no tener en cuenta las vacaciones de la empresa o factores similares al planificar sus viajes. Además, la digitalización les da más responsabilidad personal. Sin embargo, esto también significa una mayor presión. El conocimiento de tener que estar constantemente disponible y la creciente confusión de las horas de trabajo y el tiempo de ocio pueden llevar a un descenso de la calidad de vida y, en el peor de los casos, al agotamiento. Los empleados también están llamados a hacer sus propios esfuerzos en cuanto a la formación permanente y a los equipos informáticos modernos.
En lo que respecta al mercado laboral, es importante saber que las actividades manuales tenderán a perder importancia en el futuro, mientras que las actividades cognoscitivas adquirirán más importancia. Además de los especialistas en tecnología de la información, también habrá una gran demanda de enfermeras, personal médico, personal docente y técnicos en el futuro. Es difícil predecir cómo será el futuro de la digitalización. Sin embargo, es obvio que todos estamos llamados a ayudar a darle forma.
La digitalización y la transformación digital -el procesamiento y la representación digital de la información y los cambios desencadenados por ella, como la automatización del trabajo y el desarrollo de la inteligencia artificial- son omnipresentes hoy en día, e implican tanto incertidumbre como oportunidades y posibilidades.
Sin embargo, el cambio y la transformación de la sociedad es bastante natural. Es realmente impresionante lo que hemos logrado en los últimos 250 años, desde la Primera Revolución Industrial y la invención de la máquina de vapor hasta la Industria 4.0 y los vehículos en red.
La digitalización es un factor importante para ser competitivos hoy en día. Esto se aplica tanto a los empleados individuales como a las empresas e incluso a países enteros. Mientras que las empresas deben ser innovadoras, rápidas en su implementación y valientes para mantenerse al día, los empleados deben adquirir las habilidades que se necesitan en el Entorno de Trabajo 4.0.
Para las empresas, el éxito en la implementación de la digitalización significa un mejor rendimiento, ahorro de costes, la aparición de nuevos modelos de negocio y clientes más satisfechos. Sin embargo, deben prestar más atención a las normas de protección de datos, diseñar una estrategia de digitalización adecuada, invertir en nuevas herramientas de información y comunicación, y proporcionar una formación adecuada y condiciones de trabajo flexibles a sus empleados.
Los empleados se benefician de ser más flexibles en cuanto a tiempo y lugar en el que trabajar, de poder compaginar mejor la vida laboral y familiar y de no tener en cuenta las vacaciones de la empresa o factores similares al planificar sus viajes. Además, la digitalización les da más responsabilidad personal. Sin embargo, esto también significa una mayor presión. El conocimiento de tener que estar constantemente disponible y la creciente confusión de las horas de trabajo y el tiempo de ocio pueden llevar a un descenso de la calidad de vida y, en el peor de los casos, al agotamiento. Los empleados también están llamados a hacer sus propios esfuerzos en cuanto a la formación permanente y a los equipos informáticos modernos.
En lo que respecta al mercado laboral, es importante saber que las actividades manuales tenderán a perder importancia en el futuro, mientras que las actividades cognoscitivas adquirirán más importancia. Además de los especialistas en tecnología de la información, también habrá una gran demanda de enfermeras, personal médico, personal docente y técnicos en el futuro. Es difícil predecir cómo será el futuro de la digitalización. Sin embargo, es obvio que todos estamos llamados a ayudar a darle forma.
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